NUEVA YORK – Garantizar el derecho humano al agua de los Pueblos Indígenas y de toda la población, dejar de considerar al agua como un recurso económico y su mercantilización, así como reconocer, documentar y valorar el conocimiento científico indígena en materia de protección y manejo del agua, fueron algunas de las recomendaciones de los participantes del evento paralelo: “Aportes de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe para el uso y manejo Sostenible del Agua”, realizado el lunes por el Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (FILAC), con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECID), en el marco del 22° periodo de sesiones del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de las Naciones Unidas.
El foro anual reúne cada ano a representantes de los Pueblos Indígenas de todo el mundo, se desarrolla del 17 al 28 de abril de 2023 en la ciudad de Nueva York. Los debates se centrarán en el tema “Pueblos indígenas, salud humana, salud planetaria y territorial y cambio climático: un enfoque basado en derechos”.
En este acto, la primera vicepresidenta del FILAC, Dra. Myrna Cunningham, aseveró que en los diálogos regionales “El agua desde la cosmovisión de los Pueblos Indígenas”, facilitados por el FILAC, se reafirmaron los derechos humanos al agua, además de reconocer que el líquido es un bien común que nos pertenece a todas las personas. “Ese reconocimiento en la Cumbre Mundial del Agua reafirma un planteamiento que los Pueblos Indígenas siempre hemos hecho a lo largo de nuestra historia”, expreso durante la actividad.
“Los resultados de la Cumbre, el resultado de los Diálogos abre la posibilidad que podamos efectivamente articularnos mejor con los gobiernos, con otros actores para hacer una mejor gestión del agua en nuestra región”, dijo Cunningham.
Por su parte, Saul Vicente Vásquez, coordinador de la Cumbre del Agua FILAC dio a conocer que de cara a la Conferencia Mundial del Agua, el FILAC llevó a cabo algunos estudios de caso para dar a conocer las prácticas y experiencias de Pueblos Indígenas en materia de gobernanza en la gestión comunitaria del agua; asimismo realizó cuatro diálogos que abordaron las temáticas de la conferencia Mundial del Agua.
“De estas iniciativas surgieron elementos relevantes y propuestas que dan cuenta del papel fundamental que los Pueblos Indígenas desempeñan en la defensa y conservación de sus territorios”, recalco Vázquez.
Por su parte, Francisco Cali, Relator Especial de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas aseveró que aún existe mucho camino por recorrer para que los Estados reconozcan su derecho a la participación plena en la formulación de políticas internacionales sobre el agua.
“Esta exclusión ocurre a pesar de que tenemos una relación y dependencia única del agua y la tierra. Hemos conservado y protegido los recursos hídricos durante siglos a través de nuestros sistemas de conocimientos y modo de vida y tenemos derechos colectivos bien definidos sobre el agua y la tierra que nos convierte en titulares de derechos y no en partes interesadas como los sectores privados y otras entidades como las ONGs”, señaló el Relator.
De igual manera, Diego Pary, Embajador de Bolivia ante la ONU, explicó que para el año 2050, según datos oficiales, habrá una población mundial de 10.000 millones de habitantes y que ello exigirá una demanda del 50 por ciento más de alimentos y del 50 por ciento más de agua. “Esto claramente nos muestra que abras mayores desplazamientos por la crisis del agua”. Asimismo, enfatizó que no se debe mercantilizar el agua.
En el evento también participaron representantes de organizaciones y redes de Pueblos Indígenas, entre ellos Leónidas Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Eber Rojas, máximo dirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), Jesús Amadeo Martínez, Consejero Mayor del Consejo Indígena de Centroamérica (CICA), quienes coincidieron en que el agua es el agua es de vital importancia para el Vivir Bien, y que para resolver el problema del Agua, no solamente para los Pueblos Indígenas, sino que para todo la humanidad se debe fortalecer la gobernanza del territorio, con la cultura, identidad, soberanía alimentaria y justicia indígena.
A nivel mundial, existen alrededor de 476 millones de indígenas de los cuales 58 millones se encuentran en América Latina y el Caribe, muchos de ellos no tienen acceso al agua potable y saneamiento, situación que se ve agravada por la creciente presión sobre los recursos naturales sobre su territorio.