La consolidación de la actual matriz energética actual generó condiciones de injusticia epistemológica, porque desconoce la visión de los Pueblos Indígenas, sus cosmovisiones, sus creencias y su forma de organización territorial, afirmó hoy el presidente del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de la ONU, Darío Mejía, durante su intervención en el evento paralelo “Los Derechos de los Pueblos Indígenas en relación con la matriz energética mundial”, organizado por el Foro Indígena de Abya Yala, Amazon Watch, el Grupo Principal de los Pueblos Indígenas para el Desarrollo Sostenible y el Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (FILAC), en el marco de la 21 período de sesiones del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas.
Mejía, quien presentó su estudio “Los derechos de los pueblos indígenas en relación con la matriz energética mundial”, agregó que en la matriz energética “también hay una injusticia política, porque se desconocen sus instituciones propias y la propiedad de sus territorios; pero además una injusticia social porque son los que menos participan de los beneficios y acceso a la energía».
“(Esta injusticia) se generó en la matriz energética actual, si esto no se revisa, si no se transforma en la transición energética, en las llamadas energías, verdes, azules, o de los colores que le queramos poner, estas injusticias se van a profundizar. Por eso, el llamado a las instancias de las Naciones Unidas, a los gobiernos para que generen las condiciones de mejorar la participación (de los Pueblos Indígenas) y disminuir esta injusticia”, añadió.
Por su parte, la primera vicepresidenta del Consejo Directivo del FILAC, Myrna Cunningham, resaltó que la información que recoge el estudio elaborado por Mejía no fue fácil de conseguir. “Estoy casi segura de que muchas instancias no facilitaron la información o simplemente prefirieron no contribuir al presente estudio”, dijo.
“Este estudio nos hace conocer que algunos gobiernos han anunciado la flexibilización en los requisitos de licencias de exploración y explotación de recursos naturales—, incluidas fuentes de energía renovables—, al mismo tiempo que se ha pretendido establecer medidas de flexibilización de los procesos de consulta y consentimiento previo, libre e informado a los Pueblos Indígenas, lo cual parece muy contradictorio”, dijo Cunningham.
A su turno, Leila Salazar, directora ejecutiva de Amazon Watch, señaló que en la actualidad “estamos viviendo crisis climática de salud, pandemia, crisis social, económica racial, social; estamos enfrentando muchas crisis al mismo tiempo y, ahora con la guerra en Ucrania, parece que los gobiernos y las empresas están usando este momento para encadenarnos más en la dependencia al petróleo, a las energías fósiles”, aseveró.
“Necesitamos escuchar las voces de los Pueblos Indígenas, respetar su derecho de autodeterminación, soberanía, su derecho al Consentimiento Libre Previo e Informado, porque todo esto, no se está respetando y si no se respeta esto, se va seguir extrayendo combustibles fósiles y destruyendo nuestra selva, nuestro clima y los territorios de los pueblos”, dijo a su turno Amadeo Martínez, presidente del Foro Indígena del Abya Yala, quien exigió a los gobiernos que no financien proyectos de destrucción y que, en lugar de eso, inviertan en soluciones de los Pueblos Indígenas y propuestas de transición energética local.
Durante su intervención, Eileen Mairena, del Secretariado del Grupo Principal de Pueblos Indígenas, enfatizó en que se aumente el sistema de energía renovable, pero sobre todo respetando los derechos de los Pueblos Indígenas, aprovechando el liderazgo de las comunidades indígenas para que sean las propias comunidades las que desarrollen estas soluciones del cambio, en la matriz energética.
Wilder Guerra del pueblo Guayu, también dio a conocer las experiencias de pueblos indígenas de Colombia en relación a proyectos de energías renovables. “Estos proyectos son presentados como prioridad de la nación, como de interés de nación, pero no aparece por ningún lado, el interés de los pueblos indígenas, los derechos de los pueblos indígenas y los potenciales beneficios que tendrían”, afirmó.
A su turno, el secretario técnico del FILAC, Gabriel Muyuy, planteó la necesidad de fortalecer alianzas que lleven a la toma de conciencia de hacer una transición del modelo tradicional a un modelo alternativo a la producción de la energía».