“Es clave considerar el desarrollo de Cooperación Sur – Sur, tanto entre instituciones estatales y pueblos indígenas, como directamente entre pueblos y comunidades indígenas de países e incluso continentes distintos”, señaló hoy el Consejero Indígena del Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y El Caribe (FILAC), Jesús Guadalupe Fuentes.
La autoridad del FILAC destacó que esta institución es partidaria de este postulado, por ello apoya el Plan de Acción de Iberoamérica para la implementación de los Derechos de los Pueblos Indígenas, que los Estados y representantes de los pueblos indígenas acordaron durante el año 2018. “Este plan y la Declaración política que le dio sustento incluye expresamente el impulso y desarrollo de la Cooperación Sur – Sur entre pueblos indígenas y con los Estados”, dijo.
Las declaraciones fueron vertidas durante el Panel “Ventajas comparativas y oportunidades de la cooperación Sur-Sur e intercambio de experiencias, mejores prácticas y casos exitosos,” en el marco de la Segunda Conferencia de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre cooperación Sur-Sur PABA+40. El cual estuvo Copresidido por los Ministros de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional de Bangladesh y Egipto.
Aportes de los Pueblos Indígenas
En el marco de este evento, Guadalupe Fuentes, destacó la relevancia del mismo para los pueblos indígenas, “porque nos permite insistir en que los pueblos indígenas tenemos propuestas y prácticas, conocimientos tradicionales y formas de aplicarlos que son aportes concretos y reales para afrontar los grandes retos de la humanidad para un desarrollo sostenible” dijo.
Con un total de 826 pueblos y una población estimada en 45 millones, aproximadamente el 10 % de la población total de la región, América Latina es el continente de más alta demografía indígena del planeta. Estos datos se basan en cifras oficiales las cuales en general recogen datos notablemente menores al peso demográfico real de los pueblos indígenas. “En mi país, México, si consideramos a las personas que se autoidentifican como indígenas, somos la cuarta parte de los habitantes”, mencionó.
Los pueblos indígenas representan buena parte la diversidad cultural del mundo y en especial del continente; formas de vida, pensamiento y prácticas que implican respuestas diferentes antes los problemas, necesidades y desafíos de la humanidad.
En este contexto, destacó que los pueblos indígenas ponen una mirada intercultural en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. “Se debe partir reconociendo que los pueblos indígenas, como los afrodescendientes, poseemos grandes potencialidades para aportar al conjunto de la sociedad. Se trata entonces de destacar la trascendencia de la cultura indígena, de sus conocimientos tradicionales para ayudar a innovaciones a nuevas soluciones relevantes en el camino del desarrollo sostenible, en el camino del Buen Vivir”, dijo Fuentes.
Sobre el evento
El Panel contó con la intervención, principalmente, de representantes de gobiernos de China y Turquía, de la Organización para el Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y Oxfam Intermón.
PABA + 40, brinda una oportunidad única para revisar las lecciones aprendidas de las últimas décadas, identificar nuevas áreas y mecanismos donde la Cooperación Sur-Sur puede agregar valor y tener un mayor impacto, y comprometerse a construir un seguimiento adecuado y sistemático en el marco del sistema de las Naciones Unidas.
De esta manera, del 20 al 22 de marzo, líderes mundiales debatirán una declaración política que se espera llamará a un aumento de Cooperación Sur-Sur, así como a un fortalecimiento institucional de sistemas de reporte y monitoreo de este tipo de asociación.
