Cuando los ríos se reducen y los lagos se secan, el pueblo indígena aymara de Bolivia se reúne para rezar por la lluvia.
En los últimos años, los rezos se han vuelto más desesperados, ya que las sequías históricas han provocado estados de emergencia nacionales.
El caudaloso río Paraná, vital para las exportaciones de Bolivia, país sin salida al mar, ha descendido a su nivel más bajo en medio siglo.
Fuente/Páginasiete/Másinformacionaqui