Los casos se habrían dado mayoritariamente del pueblo Wichí de departamentos de San San Martín y Rivadavia de la provincia de Salta.
La presentación se hizo luego de tomar conocimiento de estos hechos a través de las Áreas de Niñez – Adolescencia y Área Mujer y Diversidad Indígena, actuantes bajo la Dirección de Afirmación del Derecho Indígena del INAI.
“La gravedad de los acontecimientos es inusitada; no se trata de hechos aislados sino que se enmarcan en una forma de violencia sistemática a consecuencias de las desigualdades y de racismo estructural, sumado a que muchas de las denuncias no han sido debidamente investigadas, sino más bien silenciadas con conductas coactivas desplegadas hacia las denunciantes/tutores/familiares/autoridades tradicionales de las comunidades, con el propósito ulterior de que a los actores materiales del delito no se les aplique ninguna sanción penal”, sostuvo Odarda.
Fuente/ El Nuevo Diario/MásInformaciónaquí